Con motivo del 25-N, entre ayer y hoy una decena de mujeres, entre personas atendidas y trabajadoras, del servicio la Bauma, gestionado por Suara Cooperativa y Cáritas, han repartido en Barcelona carteles y trípticos con un decálogo sobre cómo actuar ante la violencia machista.

La erradicación de las violencias machistas no es una opción, sino un imperativo social inaplazable que recae sobre la totalidad de la ciudadanía. En el marco del 25 de noviembre, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, damos un salto cualitativo: no nos conformamos con la concienciación. Esta lacra social exige nuestra decidida acción.

Por eso, este lunes hemos puesto en marcha una iniciativa estratégica diseñada para apoderar y dotar de herramientas concretas a toda la sociedad, ya sea como mujer que sufre la violencia machista que necesita apoyo urgente o como testigo que tiene el deber de intervenir, por lo que es necesario saber cómo actuar de forma efectiva para romper el ciclo de la violencia. La indiferencia no es una opción: la responsabilidad es colectiva y la respuesta debe ser inmediata y contundente.

Por este motivo, entre ayer y hoy desde la casa de acogida Baumagestionada por Suara Cooperativa y Cáritas Diocesana de Barcelona, ​​hemos organizado una acción que consiste en desplazarse hasta comercios, entidades o equipamientos públicos de máxima afluencia de la ciudad de Barcelona donde hemos colgado carteles y entregado trípticos informativos con un código QR. 

En torno a una decena de mujeresentre personas atendidas y trabajadoras, han participado en esta acción que ayer tuvo lugar en los distritos de Horta y Gràcia, mientras que acudirán a Sarrià - Sant Gervasi. Entre los equipamientos donde ayer se realizó la acción se encuentran el mercado de Horta y el Paseo Maragall.

Decálogo: entornos seguros contra la violencia machista

El código QR te dirige hacia el “Decálogo: entornos seguros contra la violencia machista”, que también puede encontrarse en nuestra web.

Más allá de la experiencia de las personas profesionales en este servicio, el contenido del decálogo se enriquece con la aportación de personas profesionales de servicios especializados y servicios que tienen la responsabilidad de activar los circuitos de protección.

Objetivos de la campaña

El objetivo principal de la campaña es poder activar y alinear a toda la red comunitaria para que las mujeres en situación de violencia puedan recibir una protección efectiva, coherente y presente tanto en los espacios privados y especializados como en su vida cotidiana en el espacio público. Por tanto, se persigue crear una red comunitaria, institucional y profesional que actúe de manera coordinada, con un mensaje claro y coherente a la vez que las personas que contemplan una agresión en un espacio público sepan cómo actuar o dirigirse en el momento de la crisis. En resumen, se quiere articular a la comunidad para que actúe como agente protector.

Este 25 de noviembre, Día Internacional para la erradicación de la Violencia hacia las Mujeres, queremos sumar a toda la comunidad para acabar con esta lacra, puesto que la seguridad y la recuperación de las mujeres depende de la cohesión y la corresponsabilidad de toda la sociedad.

Si quieres más información sobre cómo actuar ante las violencias machistas, también puedes consultar el Protocolo Contra la violencia hacia las mujeres de Suara Cooperativa.