La acción comunitaria es primordial no sólo para transformar la realidad de las personas atendidas, sino también de su entorno y territorio.

En este Año Internacional de las Cooperativas, desde Suara queremos dedicar en noviembre a cómo desde el cooperativismo impulsamos la acción comunitaria para mejorar la realidad de las personas, su entorno y el territorio.

Las cooperativas buscan la transformación social y económica de nuestras sociedades y, para ello, lo hacen con proyectos que están arraigados en el territorio. Por eso, nacen desde el territorio y se involucra a la comunidad.

Por tanto, es muy importante para trabajar en red con la administración pública y las entidades sociales como, por ejemplo, desde Suara Cooperativa hacemos en la Red de Personas en Situación de Sinhogarismo (XASPLL), donde nos hemos aliado con el ayuntamiento de Barcelona y las entidades de la ciudad para trabajar de forma coordinada en la mejora de las personas en situación de un riesgo elevado de exclusión.

Este mes de noviembre se celebra el Día Europeo de personas en situación de sinhogarismo y el Día Mundial de personas en situación de sinhogarismo. Uno de los grandes retos actuales es cómo hacemos frente los discursos de odio y aporofóbicos. En este contexto, los servicios de sinhogarismo de Suara Cooperativa nos estamos formando para hacer frente a estos discursos de odio y aporofóbicos para ver cómo podemos erradicarlos con acciones que también involucren a la comunidad.

También es importante involucrar a las personas jóvenes en la transformación de sus sociedades. Por eso, el alumnado del ciclo formativo de La Bastida colabora con el proyecto Sostre 360º del Maresme, gestionado por Suara Cooperativa, donde acompañamos a jóvenes en situación de sinhogarismo.

Supervivientes de la de violencia machista

Otro de los retos de la sociedad actual es cómo acompañamos a mujeres que han sobrevivido a la violencia machista. A menudo, su autoestima ha quedado dañada por los años de maltrato a la vez que carecen de red relacional.

Por eso, desde los servicios que impulsamos diferentes acciones en las que las involucramos para ayudarlas a crear red entre ellas y en las que participan directamente con el fin de empoderarlas en la toma de decisiones para mejorar su autoestima y bienestar emocional y psicológico.

Un ejemplo de ello es que el pasado año, el 25 de noviembre, Día Internacional para la erradicación de la violencia contra las mujeres cocreamos un vídeo con las mujeres atendidas en un servicio, que gestionamos con Cáritas de Barcelona, ​​de supervivientes de la violencia machista, sus hijos e hijas participaron activamente. Ellas son las que escogieron la canción, que cantaron, uno de sus hijos interpretó en piano, escogieron las imágenes que se representaron en cada escena y ellas las representaron.

Éste no es el único ejemplo, este año hemos hecho una serie de videopodcast con la Cadena Cope, donde las mujeres que han sido atendidas en este servicio han podido explicar su experiencia como supervivientes de violencia machista.

Educar con valores cooperativos

Ahora bien, si queremos transformar nuestras sociedades es necesario que lo trabajemos desde la primera infancia. Por eso, en los servicios para la infancia, adolescencia y jóvenes que gestionamos en Suara Cooperativa impulsamos una educación enfocada con los valores cooperativos.

"Con una crisis de valores importante, acelerado y fuertemente individualista, educar en valores cooperativos ya no es sólo una opción pedagógica: es una necesidad urgente", defiende Marta Gómez, Responsable de protección y buen trato a las infancias y adolescencias de Suara Cooperativa, en este artículo en el diario El Jornal.

Por ello, desde las escuelas, Servicios de intervención socioeducativa (SIS), Centros Residenciales de Acci ón Educativa (CRAE), o cualquier otro servicio donde acompañamos a las infancias, adolescencias o juventud fomentamos valores como la democracia, la justicia social, la igualdad, la solidaridad o la empatía a la vez que impulsamos el trabajo en equipo, colaborativos o las asambleas. Con ello, no sólo se les enseña a resolver conflictos o dialogar, sino que también se les prepara para vivir en sociedad de una forma activa, responsable y comprometida.

El próximo 20 de noviembre es el Día Internacional de los Derechos de la Infancia y, en este contexto, es imprescindible que desde pequeños les eduquemos en la importancia al participar y colaborar en la comunidad con el fin de construir sociedades más justas, equitativas, igualitarias y cohesionadas.